lunes, 23 de agosto de 2010

EN ESTO CONSISTE EL AMOR

"Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios। Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios। El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor। En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él। En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados. Amados, si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros. Nadie ha visto jamás a Dios. Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros, y su amor se ha perfeccionado en nosotros. 1 Juan 4:7-12



Con estas palabras tan hermosas y claras Dios nos revela a través del apostol Juan el propósito de la vida cristiana. El mundo está lleno de maldad, odio y mentiras; se necesita una transformación en la vida de cada ser humano y el amor debe ser la base de esto.
Jesucristo al estar en la tierra nos dio el ejemplo en que la vida dedicada al servicio a Dios tiene su fundamento en el amor, EL sanó enfermos, alimentó a muchas personas, hizo milagros, pero en sus sermones el recalcaba que el reino de Dios no consta de fantasías, vanidades sino en el amor a Dios y al prójimo.

El llamarse cristiano, significa un seguidor de Jesucristo y de su ejemplo. Y decía a todos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame. Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, éste la salvará. Pues ¿qué aprovecha al hombre, si gana todo el mundo, y se destruye o se pierde a sí mismo? Lucas 9:23-25



domingo, 11 de abril de 2010

Dios está pendiente de ti

En la antiguedad vivió un hombre llamado Job, su ejemplar vida fue relatada por Moisés quien lo describe como una persona justa y obediente a Dios que además era intachable, aún así le sobrevinieron situaciones que lo dejaron al borde del fin, sin esperanza, sin salud y económicamente mal.

Al principio la historia narra acontecimientos extremadamente trágicos que sucedieron en un período de tiempo muy corto, lo cual fue un golpe muy duro para su vida. Murieron los hijos, sus criados fueron asesinados por los pueblos vecinos y además se llevaron su ganado. No siendo suficiente esto, Job enfermó gravemente.



A pesar de todo, Job no pecó, ni culpó a Dios de ningún mal (Job 1:22), por el contrario cuando supo la tragedia reflexionó sobre algo que la humanidad completa debería tener en mente para vivir una vida humilde y reconocer que lo que poseemos es gracias a Dios, todos debemos estar consciente que "Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo me iré. El Señor dio, y el quitó. Bendito sea su nombre." (Job 1:21)

Dios permitió que a Job le sucedieran todas estas cosas para demostrarle al Enemigo que su siervo permanecería fiel a sus principios y aferrado a su fe.

Dios siempre estuvo pendiente de Job, así como siempre está pendiente de ti, aunque a veces pensamos que Dios se ha olvidado de nosotros eso no es cierto, El sabe lo que necesitas lo que te angustia, lo que te entristece. Somos nosotros los que nos olvidamos de Dios por nuestro modo de vida, por nuestras costumbres, porque las influencias recibidas de los medios, de los amigos, del trabajo nos desvían, porque nos enfocamos solo en lo material y principalmente porque hemos perdido la fe.

Es difícil en nuestros tiempos imitar la vida que Job tenía, su paciencia, el soportar con calma su enfermedad aunque hubieron momentos que desfallecía y se preguntaba por que le estaba pasando todo eso, lo cual es normal, nosotros lo hacemos, a veces no entendemos por qué suceden las cosas.

Hay que destacar aqui dos cosas que Job era justo, correcto y tenía una relación con Dios basada en la obediencia y la fe, aún así le sobrevinieron tragedias. Pero todo se dio bajo el contexto de una conspiración del Enemigo para hacer desfallecer el espíritu y la fe.

Ahora nosotros, que no podemos compararnos con Job, que desobedecemos los mandatos divinos y que nos mezclamos con el mundo y las cosas terrenales olvidando dedicarle tiempo al Señor con mucha más razón nos sobrevendrán tristezas, tragedias y dolor. Y esto no es porque sea una venganza de Dios sino porque es consecuencia de nuestros propios actos o de la propia maldad generalizada del mundo. Sin embargo, Dios no se olvida de nosotros porque es misericordioso, justo y sobre todo porque Dios es Amor. (I Juan 4:8)

Solo necesitamos reconocer que estamos equivocados, humillarnos y buscar a Dios y El en su gracia y su misericordia a pesar de lo pecadores que somos nos tiende la mano y nos saca del pozo en que nos encontramos.
Ya lo dice su Palabra muy claramente en 2a. Cronicas 7:14:

"Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra".

Dios nos responde aún cuando en la mayoria de ocasiones solo oramos e invocamos su nombre y pedimos ayuda, pero dejamos pendiente lo demás, en su gran amor, Dios nos provee lo que necesitamos de una manera maravillosa e impresionante, de donde menos lo esperamos. Cuando creemos que todas las puertas están cerradas, que todos los caminos están obstruidos El nos lleva la solución a nuestra vida. Todos en algun momento hemos vivido circunstancias muy difíciles en las que podemos dar testimonio que Dios ha mostrado su poder y con su mano nos ha sacado de las dificultades.

Igualmente sucedió con David y su agradecimiento está plasmado en el libro de los Salmos "Pacientemente espere a Jehová y se inclino a mi, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso. Asentó mis pies sobre la Roca y afirmó mis pasos." (Salmo 40:1,2) Todo este capítulo muestra el agradecimiento que sentía David para con Dios.
Cuando David menciona que asentó sus pies sobre la roca significa que Dios proporciona una seguridad tranquilizadora nos provee lo que necesitamos.

Estos días de crisis económica provocada por la falta de valores en la humanidad los que tenemos menos sufrimos más pues el dinero necesario para solventar las necesidades básicas es muy escaso.
Bajo estas circunstancias es cuando cada quien debe tomar decisiones acertadas y vivir una vida correcta y administrar lo poco que tenemos con sabiduría para no desencadenar eventos desagradables pues al final de cuentas son los caminos que tomamos los que nos generan las consecuencias en las que no hayamos salida, ya lo dice la Biblia en Proverbios 16:25 Hay caminos que al hombre le parecen rectos, pero que acaban por ser caminos de muerte.

Cada uno de nosotros debe autoexaminarse y reflexionar en la forma que vive la vida y si agrada o no a Dios, lo que Dios pide se resume en dos mandamientos sobre los cuales nuestro Señor Jesucristo basó sus enseñanzas:

"Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y toda tu mente. Este es el primero y mayor mandamiento y el segundo es semejante a éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo" (Mateo 21:37-39)

Si nuestras acciones en el diario vivir giran en torno a este mandato divino tendremos una mejor vida y agradaremos a Dios y El nunca se olvida de nadie mucho menos de quienes hacen el bien, ya lo dice Salmo 37:25 "Joven fui y he envejecido y no he visto justo desamparado ni su simiente que mendigue pan" estas palabras tienen gran certeza y valor en nuestros días y es una promesa de Dios para sus hijos, ciertamente todos somos creados por Dios y por su voluntad estamos en este mundo pero cada quien toma diferentes caminos, acerquémonos mas a Dios y hagamos el bien y las situaciones de la vida las podemos soportar mejor con la maravillosa ayuda de Dios.

Nuestro Señor Jesucristo dijo hermosas frases que se convierten en promesas para nosotros, Jesus dijo:

"Por tanto os digo: No os preocupéis por vuestra vida, qué habéis de comer o beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos. Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe? No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos? Porque los paganos buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. (Mateo 6:25-33) "

No debemos entender las palabras de Jesús como una invitación a quedarnos de brazos cruzados y esperar que Dios nos de todo sin hacer nada, sino de confiar en que Dios estará pendiente de nosotros en todo momento.

"Aunque estoy afligido y necesitado el Señor pensará en mí. Mi ayuda y mi libertador eres Tú. ¡Dios mío, no te tardes!" (Salmo 40:17)